Las expectativas

La despedida de soltera de mi hermana Yekuana la celebramos el fin de semana pasado lleno de mucha gozadera, con muchísima entrega por parte de sus amigas, mi madre y yo. Este evento me dejó una gran enseñanza y me invitó a conocer un poco más mis sombras, porque no vivo en piloto automatico y me siento a reflexionar.

Yo iba con expectativa e ilusión, iba con las expectativas de que íbamos a ver un amanecer de esos que he tenido el placer de ver aquí en Valencia, que realizaría un círculo de mujeres para ella y sus amigas, este era mi gran regalo para ella.

Cuando llegamos el sábado a ver el amanecer el día estaba nublado, salió el sol pero no se vio, y al culminar la clase de yoga llovió un montón, nos tuvimos que ir de la playa. Ante la naturaleza te rindes y aceptas lo que ella trae, se supone que el círculo de mujeres era después del yoga y decidimos cambiarlo para el último día. Al final no se realizó el círculo, se había ido de fiesta la noche anterior, mi hermana tenía años sin compartir con sus mejores amigas de bailar, tomar.

Se movió mucho dentro de mi al no poder llevar a cabo el círculo de mujeres, mis expectativas, estaba dolida y le pedí a yekuana tiempo para conversar y expresarme como me sentía, nos sentamos a hablar. Ella me dijo algo muy cierto. “Hermana el tema es que tenías una expectativas de mi y de lo que tu querías hacer qué era diferente a lo que yo quería”; que bonita esta relación donde puedes crecer y evolucionar.

Esta semana me ha tocado reflexionar mucho acerca de mi sombra: mis expectativas e idealizaciones. Estar aquí en Valencia ha excedido mis expectativas en cuanto a calidad de vida, sería un lugar ideal para retirarme, me encanta la ciudad, el estilo de vida y lo que ofrece.  Sin embargo, a nivel de carrera profesional y educativa estoy aceptando que posiblemente muy pronto deba moverme y voy a apostar en pro a lo que la intuición me está pidiendo y apostarle a lo siguiente que quiero.

CREER EN TU POTENCIALIDAD

Decidirme tomarme estos meses para experimentar, explorar, conocer otra cultura, conectar con la creación de mi libro, conectarme con el disfrute y el sol, ha sido bombástico, honestamente ha sido perfecto. Pero me veo como una Francesa que decidí sacarle conversación mientras jugaba sudoku en Costa Brava, ella y su esposo pasaron 6 meses en Francia y 6 meses aquí y para lograr eso debo tomar en estos momentos decisiones importantes.

Recuerdo que cuando llegué a UK, no tenía expectativas pero sí un objetivo: crecimiento educativo, aprender Inglés.  Todo lo que pasó en mis 10 años en Inglaterra excedió mis expectativas en todos los sentidos. Dar espacio y  tomarme el tiempo para no estar en Inglaterra me ha invitado a reconocer y a conectarme con el  agradecimiento de todo lo que ha sido este país para mi. 

Acabo de comprar un pasaje para visitar la Universidad en Londres donde quiero aplicar a un máster este año, llevo rato estudiando la posibilidad de mi proximo paso a nivel académico donde quiero apostarle a la unión de la comunicación, los negocios y la psicología. He estado investigando en Estados Unidos, Inglaterra y España, y hay un programa en Inglaterra que reúne lo que quiero. 

Tengo miedo… PERO mi terapeuta me dijo: "Amazonia el miedo no te esta dejando ver, todo lo que has logrado y lo que puedes lograr, te estas autosaboteando"

Ante todo esto he tenido que sentarme a sostener esa misma emoción que sentí, cuando no sucedió todo lo que planifique para la despedida de soltera de mi hermana, me ha tocado reirme de mi, y decirme: Amazonia simplemente necesitabas un break, sol,  playa, es tan difícil entenderlo? Pues para los que hemos estado en productividad constante y no estamos acostumbrados a las pausas,  y  ver las olas del mar, la expectativa de un tiempo off sin resultados medibles es difícil de procesar en nuestro cerebro. Aquí es cuando nace una nueva semilla en mi campo cerebral llamado: Merezco descansar, merezco tomar pausas las veces que sean necesario.

Debo reconocer que en este tiempo mi más grande desafío ha sido ser productiva desde otro lugar, desde el disfrute y honestamente el hecho de yo haber apostado por este espacio para mi, ha sido integrar algo muy valioso que me faltaba en el vivir: la pausa, el disfrute, esto que es muy femenino.  Debo confesar que disfruto mucho ir a la piscina a las 10 pm antes de dormir o conocer gente muy cool, siempre.

Ahora bien, no tengo ni idea de que pasará en los próximos meses, sin embargo, voy con pasos firmes ante las acciones que quiero tomar, y sin expectativas porque la vida nos puede sorprender y las cosas pueden salir aún mejor de lo que creemos. 

Extrañaba escribirles, pero otra vez, a veces necesitamos pausas para en estos espacios apreciar incluso mi pasión por este blog, sin expectativas de cuantas personas lo leen o un retorno de la inversión.

Gracias por leerme, seguiré desnudando el alma, porque las sombras no se suelen mostrar en un post de Instagram.

Te mando buenas vibras desde mi paraiso actual: Valencia